El pronóstico de Bruno Valdez se quedó corto. El paraguayo no sabía que iban a romper una marca que databa de la temporada 81-82 que ya es sólo un recuerdo. El 7-0 en el Azteca será recordado por siempre como la peor goleada de las Águilas a los cementeros.
América fue mucha pieza, ya tenía ganado el encuentro desde antes de que pitara Luis Enrique Santander. La Máquina no se presentó en ningún momento. El equipo azulcrema borró por completo a su rival desde el arranque. Richard Sánchez comenzó con la goleada. Un disparo potente se coló ante un Jurado mal colocado.
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El monólogo amarillo continuó. El mayor temor de los cementeros llegó. Henry Martín dejó en el suelo a Funes Mori y le cedió un bombón al Cabecita Rodríguez para el segundo. Jonathan dudó en festejar, pero al final se convenció y lo gritó con todo.
Dos postes fueron la respuesta cementera. El larguero se pintó de crema y evitó el descuento. Todo se le juntó a La Máquina. Funes Mori se fue lesionado; le anularon un gol a Rotondi por clara falta en el área; Baca perdió la cabeza con una entrada criminal sobre Martín y para colmo, Diego Valdés hizo el tercero en el agregado. El descanso llegó al Coloso sin saber que estaría cerca de vivir historia pura.
Desde un palco, el suspendido Diego Aguirre metió a Carneiro y Charly Rodríguez, aunque de poco sirvió.
América comenzó su ataque brutal. Henry no se quiso ir sin explotar. La Bomba entró en segundo palo y marcó el cuarto. Cruz Azul no estaba en el Azteca. Fidalgo se quitó a dos defensores y definió ante un Jurado que nada pudo hacer para el quinto.
Ver la sangre azul encendió las ganas de cazar de un águila sin escrúpulos. Federico Viñas saltó ante un tibio Cata Domínguez para el sexto. Chava Reyes, ya en los segundos finales, puso el séptimo en la frente.
El Azteca pedía el octavo, pero Santander se apiadó de Cruz Azul y evitó una humillación mayor. No hubo más, goleada histórica, América está intratable en una semana donde derrotó a dos de sus mayores rivales y amanecerá cuarto de la clasificación.
La peor goleada sobre la Máquina
Fue espectacular para las Águilas y también algo catastrófico para Cruz Azul. El 7-0 que se vivió en el Clásico Joven de la décima jornada del Apertura 2022 quedó como una de las goleadas más holgadas de América en Liga MX, la más grande en torneos cortos y el marcador más adverso para La Máquina en toda su historia.
El conjunto cementero nunca había recibido tal cantidad de goles en todos sus años de existencia en encuentros oficiales.
La máxima cantidad que había encajado en encuentros del torneo local eran cinco y lo sufrió en seis ocasiones distintas, la más cercana en el 2014 cuando Monarcas Morelia le propinó un 5-1 en el estadio Morelos con goles de Héctor Mancilla (2), Aldo Leao, Duvier Riascoscu y Oscar Fernández. Emana Achille fue quien descontó para los cementeros.
La Piedad en el 2002 y Toluca, un año antes en el Verano 2001, también hicieron vivir un infierno a los capitalinos.
Mientras que en torneos largos, tuvieron que pasar 40 años para que las Águilas le marcaran dicha cantidad (0-5).
En partidos oficiales, el equipo azul recibió un 6-1 en la Copa Libertadores del 2003 por el Fénix de Uruguay, que provocó la rescisión de varios contratos de jugadores como Oscar Pérez, Sergio Almaguer, Melvin Brown, Sebastián Abreu y Juan Francisco Palencia.
Por parte del conjunto americanista igualó la máxima diferencia que logró en la temporada 1994-95 cuando venció 8-1 a Correcaminos de la UAT con el mítico técnico Leo Beenhakker con anotaciones de Biyik, Luis Roberto Alves 'Zague', Cuauhtémoc Blanco, Uribe y Kalusha.
Esa era su máxima goleada que igualó en la décima jornada del actual certamen con el 7-0. En la mencionada temporada larga también marcó un 2-8 en la Corregidora ante Querétaro. En lo que respecta a torneos cortos, el mayor resultado que América había logrado fue aquel 7-2 en el 2009 contra los Diablos Rojos del Toluca.
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