El estreno de la ópera “El vencedor vencido”, del compositor Federico Ibarra, con libreto del escritor Enrique Serna, en la Sala Principal del Palacio de Bellas Artes, exhibió la dramática historia de Hernán Cortés y la fatídica expedición que realizó 1524, hacia las Hibueras, en Honduras, con la finalidad de castigar al capitán Cristóbal de Olid, quien se había rebelado contra la autoridad del conquistador.
Caracterizada por su puesta en escena minimalista, cuyas interpretaciones corales hacen uso de recursos de danza contemporánea y teatro experimental, esta obra pone en confrontación, de forma textual y simbólica, los límites entre la ambición, la pena y el orgullo que pudo haber sucedido tras la caída de México Tenochtitlan, en 1521, a través de las figuras de Hernán Cortés y el Tlatoani Cuauhtémoc, a quien el conquistador llevó preso junto a sus tropas a la expedición para evitar una posible sublevación.
Puede interesarte: Tenor mexicano Ramón Vargas celebra 90 años de Bellas Artes con ópera Giovana D’ Arco
En la obra, el personaje de la Malinche, quien también acompañó a Cortés en su travesía, adquiere gran valor pues, no sólo otorga mayor tensión entre Cortés y Cuauhtémoc, sino sugiere la necesidad de repensar a este personaje marcado por el estigma de la traición. En entrevista con El Sol de México, la soprano Mariana Valdés, quien interpreta a esta histórica figura femenina, habla sobre la forma en que ésta es retratada.
“Malinche es una figura polémica entre una ambivalencia entre las culturas indígenas y española, pero que al mismo tiempo representa nuestra identidad como mexicanos. En el caso de esta ópera, se presta a la interpretación del espectador, algo que me parece interesante y enriquecedor, porque no se trata de una voz que dicte su actitud, haciéndola mucho más compleja”, comenta la soprano, quien con esta ópera debutó en el Palacio de Bellas Artes.
MALINCHE MULTIFASCÉTICA
Esto que comenta la soprano se puede ver en varios momentos en los que la Malinche presenta conflictos en distintos niveles, desde su reproche y justificación de apoyar a Cortés como venganza contra el pueblo mexica que oprimió a su pueblo, así como de su amor por el conquistador español con quien tuvo a su hijo Martín Cortés. Esto, en medio de un conflicto diplomático-militar del que sigue formando parte crucial, como intérprete y consejera.
“En esta ópera podemos verla no solamente reflexiva, sino que muestra tener momentos de empoderamiento, en los que se da cuenta de que Cortés necesita más de ella que ella de él. Esta Malinche es un personaje de múltiples facetas, que reconoce el peso de su participación en los grandes sucesos de la conquista, que reprocha, por una parte, todo el daño que sufrió a manos de los mexicas, pero por otra, que ruega el cariño de Cortés, aunque no sabemos bien si es por amor genuino o como una estrategia para conservar su posición de poder” afirma la soprano.
➡️ Únete al canal de El Sol de México en WhatsApp para no perderte la información más importante
“Creo que la Malinche es el ícono de una mujer con gran fortaleza, de gran capacidad de adaptación para no perecer ante la adversidad y una vida de sufrimiento, que supo aprovechar sus habilidades para sobrevivir”, agrega.
“En el repertorio de la ópera más tradicional podemos ver que sí hay muchos personajes principales que son mujeres, pero la mayor parte son figuras ultrajadas, violentadas y que terminan con el final trágico. Creo que conforme se escriban cada vez más óperas nuevas, veremos que habrá cambios en su representación, debe ser algo como está sucediendo en nuestras propias generaciones, que van cambiando en su percepción”, finaliza.