A la ahora senadora Patricia Mercado la conocí cuando fue candidata a la presidencia en el 2006. Era tanto nuestro júbilo que enseguida le organizamos un desayuno en un club deportivo al sur de la ciudad de México para apoyarla. ¡Cuánta emoción! Una mujer que hablaba no sólo el idioma de millones de mujeres que habíamos sido ignoradas políticamente, sino que representaría, muy dignamente, a todo un país con todo su historial político, además de tener una personalidad realmente encantadora. «Palabra de Mujer», era su eslogan.
En esta entrevista, la cual aceptó con singular empatía, me entero que la Senadora estudió en Sonora la preparatoria, en un colegio que enseñaba la filosofía de la Teología de la Liberación bajo el auspicio del Sr. Obispo Raúl Vera. Después, llegó a la Ciudad de México en donde se involucró con el feminismo. A partir de eso hablamos, muy someramente, de la obra del Sr. Obispo Mendez Arceo aquí en Morelos y en gran parte del país, aunque nos faltó tiempo para hablar del tercer Obispo: Samuel Ruiz. También le mencioné que aquí vivía nuestra querida Gabriela Videla, quien fuera la vocera de prensa de Mendez Arceo.
Pude comentarle, también muy someramente, de esa fuerza vital que hay en Morelos a través de la poesía y de las letras, y de la imperiosa necesidad de tener ya a una Presidenta en nuestro país. Porque es verdad, el cambio ha empezado a darse en el mundo entero. Tenemos y hemos tenido a Ministras y Presidentas como: Angela Merkel, en Alemania; Sheik Hassina Wajed, en Bangladesh; Erna Solberg, en Noruega; Nicola Sturgeon, de Escocia, Bidhya Devi Bhandari, de Nepal; Saara Kuugongelwa, de Namibia; Mette Frederiksen, de Dinamarca; Kersti Kaljulaid, de Estonia; Tsai Ing-Wen de Taiwán. Ana Brnabić, de Servia; Halimah Jakob, de Singapur; Jacinda Ardern, de Nueva Zelanda; Katrín Jakobsdóttir, de Islandia; Sahle Work-Zewde, de Etipía; Salome Zourabichvili, de Georgia; Paula-Mae Weekes, de Trinidad y Tobago; Mia Mottley, de Barbados; Sanna Marin, de Finlandia; Zuzana Caputova, de Eslovaquia; Maia Sandu, de Moldova.
Ojalá que la Senadora se postulara para el 2024. ¡Cómo me gustaría!
La Senadora, quien no es propiamente militante del Partido Movimiento Ciudadano, fue invitada para encabezar la Lista Nacional al Senado de la República, y aceptó, porque está convencida que la carta de identidad de este partido es una agenda de principios con los cuales ella comparte. De ahí que se convirtió en parte de su fracción parlamentaria.
Me comentó que este partido está sirviendo de plataforma para muchas personas y la oferta partidaria tiene que ser paritaria para los liderazgos. Se han llevado a cabo diferentes movimientos en la sociedad civil, principalmente la gente joven con agendas nuevas que están sirviendo de plataforma: ambientalistas, defensores de derechos los humanos, por el derecho a la movilidad, a la seguridad vial, el tema de la iguala salarial y por supuesto, la agenda feminista que ha logrado tanta legitimidad en términos de la lucha contra la violencia hacia las mujeres en todas sus formas, más aún, a partir de lo que pasó en Argentina con el reconocimiento del derecho a decidir de las mujeres.
Su partido está haciendo una plataforma de participación electoral para activistas, ciudadanas y ciudadanos libres que no están en un partido político y que tampoco quieren estarlo, pero que quieren llegar con sus agendas a espacios de toma de decisión, ya sea en un gobierno municipal, en un congreso estatal, o al congreso federal para impulsar estas agendas tan diversas: derechos humanos, derechos de las mujeres, el tema de la política distinta de las drogas, una política distinta para resolver los problemas de inseguridad en el país. En fin, hay movimientos muy diversos con liderazgos muy intensos y muy interesantes, y parece ser que muchas y muchos quieren participar electoralmente con algún partido político porque no hay otra manera de hacerlo. Bueno, sí hay otra manera, con las candidaturas independientes, pero en este momento prefirieron ser parte de un colectivo.
En estas elecciones, las más robustas de todos los tiempos por esta homologación de calendarios, la oferta partidaria tiene que ser paritaria en todos los estados de la República. Fue lo último que resolvió el tribunal para que la representación paritaria y alcance a las gobernaturas. De ahí que se espera tener, no sólo una gobernadora, pero algunas más y será mayor la representación de las mujeres. Se van a jugar diferentes agendas, ya que la ciudadanía está menos dispuesta a retóricas demagógicas, pero está más dispuesta y atenta a que las historias de las candidaturas sean más compatibles con las promesas y los compromisos de campaña. Eso va a ser que sea muy diversa, más plural, con muchas ideas en la mesa, como los compromisos de reformas legislativas y política pública.
La Senadora Patricia, mientras, tanto, seguirá en el Senado de la República, pues su gestión abarca dos legislaturas; lo que va a cambiar es la Cámara de Diputados y Diputadas.
Si bien Morelos no tiene elección a gobernador, son las presidencias municipales, las regidurías y la cámara local las que están en juego. Ya veremos cómo se forman las planillas.
¿Alguien se apunta?