Semana Santa | Los Matacueros de Yecapixtla, tradición muy viva

Estos personajes, considerados parte de la cultura de Yecapixtla, son los encargados de brindar seguridad a las imágenes durante la celebración religiosa

Óscar García / El Sol de Cuautla

  · viernes 29 de marzo de 2024

Los Matacueros son parte de la cultura de Yecapixtla y durante Semana Santa cuidan las nueve imágenes que salen del exconvento de San Juan Bautista. /Óscar García / El Sol de Cuautla

Un grupo de 95 matacueros de Yecapixtla y 160 personas disfrazadas de fariseos participaron este Viernes Santo durante la escenificación del viacrucis por la crucifixión de Jesucristo, la cual convocó a más de 5 mil personas que abarrotaron las calles céntricas del municipio.

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Estos personajes son parte de la cultura de Yecapixtla y durante la Semana Santa cumplen con la misión de cuidar las nueve imágenes que salen del exconvento de San Juan Bautista para ser veneradas en las casas de los mayordomos que son los encargados de hacerles una celebración.

Nuestra labor es darle realce a las tradiciones que se vienen celebrando en Yecapixtla; cada año estamos presentes durante la veneración de las imágenes a las que les hacemos guardia, con el fin de darles seguridad

Lucio Álvarez Contreras, uno de los cuatro capitanes de los matacueros

Dio a conocer que la labor de los matacueros comenzó en este año desde el pasado 17 de marzo con la salida de las nueve imágenes de la céntrica iglesia de San Juan Bautista, las cuales fueron distribuidas en diferentes casas donde se les realizó una velación como parte de la celebración.

Regresadas al templo durante los días previos a la Semana Mayor, las imágenes volvieron a salir este Viernes Santo a las calles para acompañar la representación del viacrucis de Jesucristo que recorrió los alrededores del centro del municipio cecinero por casi 2 kilómetros.

Y ahí estuvieron nuevamente acompañando al cortejo religioso los matacueros, vestidos con sus llamativas ropas de satín, y máscaras muy parecidas a las que usan los chinelos con las que se realiza una imitación burda de los españoles de la época de la conquista.

Durante el recorrido salen acompañados de gente que va tocando un tambor y una flauta en señal que los matacueros están presentes.

Ellos caminan y hacen paradas acompañando a las imágenes, ponen orden entre la gente que se une a la procesión a su paso, siempre haciendo sonar una gran cadena con la que, dicen, se representa la opresión que en su momento vivieron los indígenas a la llegada de los españoles a territorio nacional.