La localidad de Chalcatzingo se encuentra en el municipio de Jonacatepec, ubicado en la parte oriente del estado de Morelos. Situado cerca del valle de Amatzinac, en las laderas al sur del volcán Popocatépetl. Las tierras anchas y planas del valle están constituidas por sedimentos volcaniclásticos, cortadas por barrancas profundas y abruptas, en cuyo fondo se ubican dos cerros interconectados: el Cerro Delgado y el Cerro Chalcatzingo, éste último de mayor tamaño, también conocido como Cerro Gordo o Cerro de la Cantera. Bajo la falda de estos Cerros rocosos, yace el sitio arqueológico de Chalcatzingo.
En 1932, la arqueóloga Eulalia Guzmán (1890-1985) responsable del Departamento de Arqueología, se traslado al pueblito de Chalcatzingo, tras reportes de pobladores sobre un deslizamiento en la ladera del Cerro de la Cantera. Posteriormente a una lluvia torrencial habria quedo al descubierto un relieve labrado en una gran roca. En esta oportunidad, Guzmán reportó el hallazgo de cuatro relieves, entre ellos, el monumento llamado “El Rey”.
Casi 20 años después, en 1953, el arqueólogo Román Piña Chan, reanudó las exploraciones en el sitio. Mediante calas y pozos en el montículo y en la plaza principal se recuperaron fragmentos de cerámica similares a los hallados en sitios como Zacatenco y Tlatilco en el Valle de México, confirmando así la presencia de un asentamiento durante el período Formativo en Chalcatzingo.
Las exploraciones de la arqueóloga Carmen Gloria Cook, publicadas en su libro “Sculptures and Rock Carvings at Chalcatzingo Mor” (1967), plantearon su posible pertenencia a la cultura Olmeca, con excepción del monumento 30, que aparentemente corresponde a un marcador de juego de pelota similar a los identificados en Teotihuacan. También señaló que, si bien Chalcatzingo es un sitio ceremonial muy distinto a los conocidos en el Golfo de México, guarda similitudes de estilo en sus representaciones y arquitectura, por lo que puede afirmarse que se trata grupos culturales afines.
Sin embargo, casi cuatro décadas después de las exploraciones hechas por Eulalia Guzmán, la naturaleza de Chalcatzingo continuaba siendo tema de debate debido a la “presencia Olmeca”, al denotar la presencia de elementos estilísticos olmecas reportadas por Guzmán, Román Piña Chan, Carmen Cook. Resulta difícil el poder determinar el desarrollo que ha tenido el estudio de esta civilización en Chalcatzingo: ¿Habría sido una colonia Olmeca? ¿Un centro de control de comercio? ¿Qué tipo de asentamiento hubo en Chalcatzingo durante el período Formativo? ¿Qué es Chalcatzingo?
Con estas anteriores preguntas el arqueólogo Jorge Angulo Villaseñor reanudó las investigaciones en el sitio a través del Proyecto Arqueológico Chalcatzingo (1972-1974), en conjunto con el arqueólogo David Grove de la Universidad de Illinois y más tarde el también arqueólogo Raúl Arana, quienes tenían un mismo propósito de dar respuestas a las expresiones talladas en bajo relieves y lo que pudo representar los periodos formativos del asentamiento prehispánico en Chalcatzingo.
Para lograr documentar el Proyecto Arqueológico Chalcatzingo, Angulo Villaseñor se respaldó de su cámara fotográfica, captando junto con la ilustradora y artista plástico Chappie Angulo, no solo para el seguimiento en cada descubrimiento, sino para dar validez a las excavaciones realizadas en el sitio. Para el arqueólogo Angulo, plasmar los momentos, también significaba retratar un Chalcatzingo a poco más de 35 años de su primer reporte.
En la Fototeca “Juan Dubernard” se encuentra un álbum llamado “Relación Fotográfica del Estado de Morelos” y se compone de series de imágenes que aborda temas sobre arquitectura, arqueología y antropología. Además de una serie fotográfica que se conforma del Proyecto Arqueológico Chalcatzingo de 1972 a 1974.
Esta serie se divide en otras dos series fotográficas: la primera trata de trabajos arqueológicos, es decir; salvamento arqueológico, registro de piezas, mantenimiento del sitio, inspección arqueológica, el hallazgo, consolidación de Estelas y Bajorrelieves esculpidos directamente en las caras rocosas, los trabajos de consolidación y en últimas etapas, los momentos estatigráficos del subsuelo, así como el registro puntual de pictografía en cuevas, que en su mayoría fueron localizados en el Cerro Cantera, de igual forma se observan registro del paisaje desde el Cerro Delgado.
Pero, Jorge y Chappie Angulo no solo registraron hallazgos arqueológicos, también captaron escenas de la vida cotidiana en Chalcatzingo, por ejemplo, integrantes de una familia, reposan en los patios de las humildes casas donde se halla su Cuexcomate. El paisaje de los alrededores, adornado de cactus, cazahuates, palos de brasil, amates negros y amarillos, guamúchiles, guajes, mezquites y arbustos pequeños dan un significado de apropiación.
Resulta interesante contrastar este registro, en especial una imagen en la que se capta a la familia Zarate en el patio de su casa, la cual muestran una figura prehispánica ante la cámara de Angulo y Chappie, esta representacion refleja la cosmopercepción de la cultura Chalcatzinga que han sido estudiada por el antropólogo Miguel Morayta señalando que: “la interacción que tiene los pobladores con la zona arqueológica en ese momento con el pasado arqueológico era el saqueo y trafico de piezas arqueológicas; al igual que tantas otras comunidades del país, las piezas arqueológicas no son vistas como parte del acervo histórico cultural de la nación, como patrióticamente era de esperarse. En realidad, el significado de las piezas lo determina el valor monetario que podrían tener ante los turistas nacionales y extranjeros y uno que otro traficante profesional.” Es claro que la figura fue extraída del sitio arqueológico y entendamos que, para ese tiempo, la apropiación de objetos arqueológicos era común.
Cabe mencionar que el antropólogo Morayta trabajó en el “Proyecto Arqueológico Chalcatzingo” y desarrollo a la par el proyecto “Antropología y Etnología de Chalcatzingo, Morelos” con la intención de realizar investigaciones desde la mirada de varias disciplinas sobre una misma región, con el objetivo de ampliar el desarrollo sociohistórico.
Estas imágenes, ahora se encuentran bajo resguardo de la Fototeca “Juan Dubernard Chauveau” de la Delegación INAH en Morelos y constituye un documento que reflejan las primeras investigaciones del Centro Regional Morelos-Guerrero.
Referencias:
➢ Angulo, Jorge., Una visión del Museo Cuauhnáhuac-Palacio de Cortés. Recopilación historica-arqueologica del proceso de cambio en Estado de Morelos. SEP-INAH, 1979.
➢ Grove, David C., Ancient Chalcatzingo, University of Texas Press, 1987.
➢ Grove, David C., Chalcatzingo. Ocho decadas de exploraciones, Arqueologia Mexicana No.153, sep-oct. 2018, Pp-32-39.
➢Morayta Mendoza, Luis Miguel., Chalcatzingo, persistencia y cambio de un pueblo, SEP- INAH, 1981.