Gabriel Moncada Cartagena inauguró su exposición fotográfica "Parachicos, la gratitud que permanece" en el Museo Exconvento de Tepoztlán, serie de imágenes que retratan el ritual del parachico, la tradición que mantiene viva la cultura chiapaneca.

La historia cuenta que 200 años después de la llegada de los españoles, en la Antigua Guatemala vivía una adinerada hacendada española cuyo hijo estaba muy enfermo y no encontraba la cura para su mal. Llega a sus oídos que en Chiapa de Corzo podría encontrar el remedio. Sin más que decidir lleva a su hijo con los curanderos del pueblo, los cuales lo llevan a sanar a ribera del Río Cumbujuyu en un manantial de aguas termales. Años después, el pueblo sufrió una gran plaga que causa hambruna, males y enfermedades, así que María de Ángulo, en agradecimiento ayudó a los habitantes del pueblo. Este acto de amor, también hizo que la población agradeciera de tal forma que acudía a visitar a su pequeño hijo enfermo y lo animaban con danzas y cantos que dedicaban "para el chico". Y es así que el pueblo hizo la promesa de celebrarle de la misma forma que a sus santos patronos.

Originario de Chiapa de Corzo, Gabriel creció y vivió desde pequeño esta tradición, y, como gran aficionado a la fotografía, decide capturar esta tradición a través de su lente y plasmarla en magníficas imágenes.

"La idea es mostrar cómo la unión de un pueblo está ligada muchas veces con las tradiciones milenarias, y que hay una simbiosis entre la llegada de los españoles y las deidades a las que que antes tenían, en este caso los indias chapanecas. Y cómo a través de los años, y hasta el día de hoy, muchas cosas permanecen y se mantienen en una unión que el pueblo vive y lo da con mucha fe, más allá de las leyendas. Lo que quiero mostrar es un documento que esas festividades siguen sucediendo, y la alegría que representan para todos los habitantes de ese pueblo y de quienes lo visitan", comentó Gabriel Moncada.

A través de 42 fotografías, Gabriel presenta un documental con imágenes llenas de colorido y texturas que reflejan lo que pasa en ese pueblo durante la festividad que se realiza año con año del 15 al 22 de enero. Plasmando las alegrías sobre todo, porque la gente lo vive e inclusolos más grandes hasta lo sufren cuando se acaba la feria.

"La fotografía de Moncada alude a cierta nostalgia del pasado y al goce del sincretismo integrada a su cotidianidad. Esta mezcla entre la festividad y la ritualidad enriquece sus riesgosos encuadres, en los que no sólo enaltece al personaje principal sino a varios escondidos en distintos planos de la imagen. 'Para chicos la gratitud que permanece' destaca los vínculos entre la fotografía y el mundo real. Esta serie en particular brinda una herramienta de revelación y aprendizaje sobre esta majestuosa festividad, los vestigios de un poderoso pasado despiertan hoy un gran entusiasmo por regresar a nuestro origen fusionando la contemporaneidad", escribe Claudia Miranda, curadora de la exposición.

Gabriel ha realizado esta serie fotográfica durante tres años en diferentes momentos y etapas con el objetivo de mostrar todo lo relacionado con la tradición y sobre todo, cómo ha evolucionado y pasado entre generaciones.

"Como la idea es documentar la festividad del pueblo y su esencia, algunas fotografías fueron capturadas durante la noche, pues representa la unión y las vivencias del lugar. Además, al tomarlas en etapas y momentos diferentes se muestra su evolución y cómo ha pasado de generación en generación, los santos patronos se van nombrando cada año o cada dos años, para mantener con ese fervor la tradición. Y hay muchas generaciones nuevas, ves a los niños y a los adolescentes vestidos de chiapanecos, ahorita se está dando un gran cambio en los Parachicos incluso mayor participación de las mujeres".

Cabe destacar que por iniciativa de Claudia Miranda y Lucía Ortiz, directora del Museo Exconvento de Tepoztlán, la exposición se inaugura a la par del Carnaval de este pueblo mágico, con la finalidad de mostrar la contraparte de ambas tradiciones, en las que hay muchas cosas en común, pero desde otros enfoques.

"Espero que la disfruten acá en Tepoztlán y que vean que más allá del Carnaval que existe aquí, también existen otras festividades que tienen cosas similares, pero al mismo tiempo, unos lados muy contrarios".