Enrique Anzures Carrillo, escritor cuautlense, presenta su libro Vive Cuautla en donde narra las tres etapas que marcaron la historia de la ciudad histórica, en dónde lleva a los lectores a conocer cómo era la Heroica en la época colonial, después el proceso de Independencia, y cómo la región se vuelve de gran trascendencia en la Revolución y por último la actual Cuautla.

El escritor señaló que la idea de escribir este libro surge por la necesidad de platicar de manera amena qué pasó en Cuautla durante la época prehispánica-colonial, para narrar lo que sucedió en la Independencia, para después llegar a la Revolución y de ahí a la época actual.

“De la Independencia hay mucho, por todos los libros que existen del Sitio de Cuautla, sin embargo nos hace falta conocer que pasó antes y después, porque Cuautla tiene una historia bastante larga, por ello surgió este libro en donde se expliqué a grandes rasgos que ha pasado en Cuautla durante estos 400 años”, manifestó.

En la época prehispánica en Cuautla, los tlahuicas eran muy fuertes por lo que ellos tributaban su fuerza, la cual se realizaba de dos formas: en especie, que era el intercambio de maíz, frijol, algodón que eran los principales productos, y cuando debían hacer la guerra a Puebla o Tlaxcala, los guerreros tlahuicas iban a pelear.

Señaló que dentro del libro se habla que estaba entre dos ríos, el río Cuautla y el río Chignahuapan, el cual ya se extinguió, además que estaba en la zona donde se encuentra el balneario Las Tazas, por lo que se narra la importancia que tenía ese río porque era el encargado de llevar agua a Anenecuilco, El Hospital, y otras comunidades, de las cuales de extraían bagre y trucha; había mucha flora y fauna que hoy ya desapareció.

“Durante el período colonial, Cuautla surge como capital política por las haciendas y esto tiene que ver después con los acontecimientos de la Independencia y la Revolución, por lo que hay dos sitios, el sitio por Morelos en 1812 y el sitio de Zapata en 1912, lo cual es lo que narramos a grandes rasgos en este libro”, relató Enrique Anzures.