La importancia de la comunidad es algo que los morelenses tienen en alta estima, al igual que el valor de la madre tierra y lo central que implica el cuidado del medio ambiente.
En Morelos, su gente —y eso lo sé por experiencia— tiene una conexión especial con la naturaleza, un entendimiento basado en el respeto y el cuidado de los ecosistemas.
Este es un conocimiento que ahora debemos aplicar a la pacificación en todos los ámbitos, a la formación de una ecología de la seguridad, en la que la creación de entornos seguros sea entendida como una labor comunitaria y en comunión con el medio ambiente en el que nos desarrollamos.
La inseguridad es uno de los temas que más aquejan a los ciudadanos. Garantizar el bienestar de las personas y de sus bienes es una tarea ineludible del Estado, en este caso desde el gobierno central encabezado por Cuauhtémoc Blanco, hasta el Fiscal Uriel Carmona.
De acuerdo con el reporte DISI (Denuncia, Inteligencia, Seguridad, Innovación) del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México, en Morelos las carpetas de investigación por delitos de alto impacto disminuyeron 5% en el primer trimestre de este año en comparación con el 2019.
A nivel nacional, la disminución en el mismo periodo fue del 29%.
Construir entornos seguros, bajo el concepto de ecología de la seguridad, implica una participación comprometida y activa de diversos actores sociales, no solo del gobierno: empresarios, ciudadanos, medios de comunicación, líderes de opinión, organizaciones civiles.
La articulación de acciones encaminadas a la seguridad puede y deben caminar de la mano. Comunidades que se unen para establecer medidas de seguridad, desde un enrejado hasta alarmas vecinales. Empresarios que favorecen la cultura de la prevención en sus negocios.
La ecología de la seguridad es el pilar de la confianza ciudadana y de la mejoría en la percepción sobre el ecosistema en el que conviven los seres humanos.
La Encuesta de Seguridad Urbana (ENSU) del INEGI ubica a Cuernavaca como el tercer municipio del país con la mayor percepción de inseguridad.
El estudio señala que el 87.8% de los habitantes consideran inseguro vivir en Cuernavaca, tan solo superado por Ecatepec, Estado de México, y Fresnillo, Zacatecas, con 89.9 y 94.2% respectivamente.
Además, en Cuernavaca, el 76.4% considera que en los próximos meses la inseguridad seguirá igual o empeorará.
Le ecología de la seguridad es un conjunto de elementos que contribuyen a restaurar la confianza. Cultura de la prevención, bases de datos, capacidades institucionales desarrolladas, interrelaciones humanas mediadas por la ética del individuo y el principio de orden de la ley.
El cuidado del espacio público y privado está en el centro de la permanente construcción de una comunidad segura ante las acechanzas de la delincuencia.
@guerrerochipres