No se cancelará la Consagración de la Parroquia de Santiago Apóstol, de Zacatepec, sólo la verbena popular programada que estaría amenizada con un grupo de la Ciudad de México, dio a conocer el párroco José Trinidad Hernández Vázquez al señalar las medidas y control de acceso.
El párroco rechazó que por la pandemia del Covid-19 se suspenda la ceremonia de consagración de este templo que se reconstruyó tras los severos daños del sismo del 19 de septiembre del 2017, dijo en entrevista con este medio; “a la comunidad parroquial se le informa, sí se va a llevar a cabo la consagración, todo sigue igual, sólo que se van a tomar las medidas que marcan los protocolos de salud, como las medidas de higiene, se van a dar bolsitas de gel antibacterial, tenemos más de 2000 bolsitas ya preparadas que se han conseguido y se van a repartir recomendado evitar el contacto entre feligreses”.
Pidió que los enfermos de tos y gripa, personas de la tercera edad y niños de brazos, por favor no se presenten, “se les está dispensando la ausencia en la liturgia”, dijo al advertir que gracias a Dios, esta zona ésta muy sana, “no hay mucha gente que vaya al extranjero, pero quiero pensar que nuestro ambiente de la zona de Morelos seguirá sano”.
De todas las actividades que se tenían preparadas por la consagración, lo único que se va a cancelar es la última parte, la verbena popular, que sería amenizada por un grupo musical de la Ciudad de México: “se canceló y solamente se repartirán los alimentos, para que los lleven a su casa, no vamos a tener ninguna reunión masiva, como lo piden las autoridades de Salud.
El obispo Ramón Castro Castro viene a consagrar el templo; “lo cuestioné para que quedara claro, ver qué medidas se van a tomar, para decirlo a la comunidad y no; él dijo que todo sigue adelante, hay algunos sacerdotes de Querétaro que han preguntado, porque en ese estado el obispo ha pedido que no haya celebraciones, pero nuestro obispo dice que no se van a cancelar, se van a tomar medidas y las iglesias permanecerán abiertas.
Pero va a ser una misa, como la dominical, sólo se va a permitir el acceso al número de lugares que hay (300), y se le va a pedir que sean comprensivos porque en la parte exterior se van a colocar entre 800 y 900 sillas, con una pantalla gigante para que puedan seguir la celebración como si estuvieran en la iglesia y posteriormente podrán entrar a la iglesia, que estará abierta hasta que la gente lo decida.
“Gracias a Dios por la celebración y a los feligreses les pidió orar mucho a nuestra madre santísima, para que permanezca la salud ambiental que necesitamos y ofrecer este sacrificio estamos viviendo, porque hubiéramos querido celebrar esta consagración en forma más familiar, pero esto no es posible”.