Por Estefanía Pérez Díaz
El acero es un material esencial para la economía y la vida de las personas. Es necesario para la construcción e infraestructura, sector automotriz, equipos mecánicos, transporte, electrodomésticos, herramientas y fabricación de máquinas, entre otros.
Para producir el acero, se requieren de grandes hornos para mezclar los elementos como el carbón y el hierro, se cargan y calientan a más de 1000° C para que haga combustión.
De acuerdo con cifras de la Asociación Mundial del Acero, en 2023 de 1763 MT producidas, el 52% fue utilizado para la construcción e infraestructura, siendo el principal sector que utiliza el material. De esta producción, los principales diez países productores son: China, India, Japón, Estados Unidos, Rusia, Corea del Sur, Alemania, Turquía, Brasil e Irán.
Como material de uso permanente puede ser reciclado sin perder sus propiedades. El
acero también es parte fundamental de una economía circular exitosa. Para la sociedad, los
beneficios incluyen: productos duraderos, generación de empleos, reducción de emisiones
contaminantes y la conservación de materia prima para futuras generaciones.
En el estudio “el papel de la manufactura de acero en la economía global” de Oxford Economics, se midió el impacto de la industria del acero en la generación de empleos de manera directa e indirecta: por cada dos empleos, se generan trece más en toda la cadena de suministro, en el 2020 generó 1,046,000 empleos de forma directa e indirecta, según datos del informe de la Asociación Mundial del Acero.
Pero ¿cuáles son los retos que tiene la industria frente a las tendencias actuales?
En el contexto internacional, China produce el 50% de la producción total de acero, lo que ha generado incertidumbre y tensión global debido a que los países están implementando restricciones comerciales, aranceles y medidas antidumping para proteger sus mercados locales. El liderazgo chino como mayor productor es resultado del apoyo que el gobierno otorga a las empresas de su nación para, incluso, producir más de la demanda mundial. Es así, que se generó una problemática para el ingreso de acero chino a otros países. Esto llevó a preocupaciones sobre los desequilibrios en el mercado global, la competencia desleal y la fluctuación en los precios del acero.
La producción se puede ver afectada por la demanda, condiciones económicas y la competencia global, por esto, es importante considerar las tendencias para al actuar de países y empresas que importan y exportan el acero.
México ocupaba en el ranking mundial del 2022 la posición decimocuarta a nivel mundial
y segunda posición en la región Latinoamericana. Por lo tanto, México es uno de los mayores
productores de acero en el mundo.
La industria del acero en México promueve la adopción de tecnologías avanzadas y procesos eficientes para mejorar la calidad de los productos y aumentar la competitividad en el mercado global. Además, el transporte de carga desempeña un papel esencial en la industria del acero en México al garantizar un flujo continuo de materias primas y productos, facilitar el comercio internacional y respaldar la operación eficiente de la cadena de suministro siderúrgico en el país.
En cuanto a la sustentabilidad, La Asociación Mundial del Acero ha reportado su rendimiento de sustentabilidad desde el 2004, este lo hace mediante ocho indicadores. En 2022, 104 compañías y asociados a nivel mundial compartieron la información correspondiente considerando los siguientes indicadores: intensidad de CO₂, intensidad de energía, eficiencia del material, sistemas de gestión ambiental, tasa de frecuencia de lesiones con pérdida de tiempo, capacitación, inversión en nuevos procesos y productos, valor económico distribuido.
Los países de América Latina, en conjunto con la Asociación Latinoamericana del Acero, han implementado seis temas materiales y ocho indicadores regionales que ayudarán a fortalecer sus ventajas competitivas, la visión del desempeño sustentable, su papel en el mercado global y las tendencias actuales, vinculados con la metodología de la Iniciativa Global de Reporte (GRI) y los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Los temas materiales son: estrategia climática y eficiencia energética, salud, seguridad ocupacional y bienestar, ética, integridad y su cumplimiento, atracción, desarrollo y retención de empleados, emisiones atmosféricas y diversidad, inclusión y equidad.
La logística del acero busca ser eficaz y eficiente para evitar retrasos en la cadena de
suministro. Para que el material logre llegar de un lado a otro se involucran; las navieras, agencias
aduanales, terminales, líneas transportistas; y de manera indirecta, las comercializadoras o
importadoras. Dependiendo del destino del acero, se involucran diferentes agentes.
Los agentes implicados en la industria están en búsqueda de la mejora continua con la transición a la sustentabilidad. Se espera que los involucrados en la cadena de suministro del acero vayan midiendo sus actividades y procesos para lograr los objetivos establecidos a nivel local, regional e internacional.
Finalmente, la industria del acero se ha ido transformando a lo largo de los años; si bien, su producción causa grandes cantidades de GEI, los molinos, laminadores y transformadores intentan concentrar sus esfuerzos en reducir su impacto en el medio ambiente. Esto genera que los demás actores involucrados en la cadena de suministro también sean parte de la transformación que la industria está buscando. Para que esto pueda ser posible, se requieren mecanismos de estrategias que les permita a las empresas lograr los objetivos nacionales e internacionales a los que, los gobiernos y la sociedad se han comprometido a cumplir.
ESTEFANIA PÉREZ DÍAZ es Licenciada en Negocios Internacionales, Maestra en Administración de Empresas para la Sustentabilidad y Docente por el Instituto Politécnico Nacional. Miembro del PJ del COMEXI. Síganla en @_FannyPD