/ viernes 28 de junio de 2024

Las funciones del subdirector académico

Por María de los Ángeles Martínez Álvarez

Las instituciones de educación básica se encuentran conformadas por diferentes actores que tienen ciertas funciones. Estos se refieren a el director, subdirector, orientadores, docentes y personal administrativo que tienen cada uno la finalidad de que la educación se lleve a cabo como lo mandata el artículo 3° constitucional.

De hecho, aunque la figura de máxima autoridad recae en el director, es importante reconocer el papel que desempeña el subdirector académico ya que esta figura cobra relevancia al ser una pieza fundamental a la hora de cumplir con los estándares preestablecidos en dicho Artículo Constitucional.

Pareciera que la tarea del subdirector no va más allá de la observación de clases y de cerciorarse de que los docentes realicen una planificación adecuada acorde a los contenidos y procesos de aprendizaje que emanan del plan y programas de estudio. Sin embargo, existe mucho más que eso ya que la tarea es ardua en cada uno de los pasos que va señalando y dirigiendo dentro de la institución puesto que, si se hace una enumeración de las acciones a realizar, al final se puede hacer una comparación con un director de orquesta que lleva sobre sus hombros el buen desarrollo académico pedagógico en todos sus sentidos.

De hecho, este director de orquesta debe llevar de manera pertinente los tiempos, señalamientos y espacios para que se pueda transmitir a la audiencia lo que el compositor quiere mostrar, así mismo un subdirector académico debe estar pendiente de todo lo que le compete para poder dar los resultados que espera la población al momento de hacer sincronía con los aprendizajes y, sobre todo, que se pueda concretar el perfil de egreso.

El subdirector académico es multitareas. A continuación, se desarrolla parte de las funciones que realiza con la finalidad de obtener los mejores resultados en cuestión enseñanza-aprendizaje. Vamos por pasos.

Primeramente, debe tener una relación estrecha y directa con el director para la organización, planeación y toma de decisiones que favorezcan a la institución.

Segundo punto que va dirigido inherentemente a su función, es decir, que los docentes conozcan y se apropien de los planes y programas de estudios con la finalidad de garantizar que los estándares educativos se cumplan. Una de las partes necesarias que se deben considerar son los elementos que debe llevar su planificación y, como en muchas ocasiones no existen los espacios para que se reúnan todos los docentes y a su vez puedan ser partícipes de la construcción de un boceto, se consideran espacios como los consejos técnicos (CTE), esto con la intención de que todos los docentes a su cargo tengan presente los elementos base para el desarrollo de las metodologías a trabajar hoy en día con la propuesta de la Nueva Escuela Mexicana (NEM).

Hay que considerar en todo momento que, de acuerdo a la nueva propuesta, existe la autonomía profesional por lo que no se trata de homogenizar un formato de planeación, pero si tomar en cuenta los elementos que sin duda alguna deben tener. Una vez que el docente realiza su planeación, el subdirector académico deberá dar su visto bueno, se encarga de hacer la revisión de todas las disciplinas que enmarca la malla curricular sin olvidar tener siempre a su alcance el plan y programas de estudio. En consecuencia, una vez hecha la revisión se realiza, en caso de ser necesario, la retroalimentación o el acompañamiento de acuerdo a lo que el docente requiera, tomando en consideración que se garantice que la educación sea de excelencia.

Tercer punto, el subdirector debe conocer las características particulares de sus docentes a cargo ya que de esa manera será la forma en cómo podrá acercarse para hacer el acompañamiento o dar las sugerencias de apoyo para la mejora de la práctica docente como lo son capacitaciones y cursos. De igual manera podrá dar la evaluación del desempeño al docente observado, cuidando siempre esas relaciones interpersonales donde el docente no lo vea como una fiscalización hacia su trabajo o que, en su defecto, se sienta mal porque se le hacen observaciones para la mejora, es decir, aprender del error.

Es por ello que es preponderante que se tenga un conocimiento de las personas con las que trabaja ya que, a partir del ambiente que genere con los docentes de la institución, se podrá llevar con mayor responsabilidad el cumplimiento de las políticas educativas y la normatividad que se requiere para el buen desempeño de los docentes en este proceso de enseñanza aprendizaje.

Cuarto punto, brindar el apoyo directo en cuestiones de carácter disciplinario cuando este rebase al docente, es decir, hacer una intervención directa con padres de familia para que se lleguen a acuerdos que favorezcan en todo momento la formación académica de los educandos.

Quinto punto, se tiene la obligación de estar a la vanguardia del conocimiento de las metodologías propuestas en cada plan y programas de estudio, así como el uso de la tecnología para el desarrollo efectivo de los conocimientos.

Sexto punto, dar la seguridad a sus docentes es parte primordial de su función para lograr un profesorado comprometido con su labor que fomente la competencia sana entre ellos teniendo en cuenta el liderazgo, la empatía y el humanismo sin olvidar considerar siempre esos saberes con los que cuenta cada docente desde su experiencia a lo largo de los años en servicio que deberán complementarse con los conocimientos programados dentro de los planes de estudio.

Se puede observar que si no hay un buen dirigente dentro de las instituciones los resultados no serán favorables como cuando se hace una metáfora al hablar del director de orquesta pues si él no hace lo que le corresponde al dirigir y llevar los momentos y los tiempos adecuados, los resultados pueden ser catastróficos.

MARÍA DE LOS ÁNGELES MARTÍNEZ ÁLVAREZ es Doctorante en Planeación Evaluación y Gestión Educativa además de Maestra en Interculturalidad para la paz y los conflictos escolares por la Escuela Normal de Ecatepec. Actualmente es subdirectora académica a nivel secundaria, así como profesora en el mismo nivel educativo.

Por María de los Ángeles Martínez Álvarez

Las instituciones de educación básica se encuentran conformadas por diferentes actores que tienen ciertas funciones. Estos se refieren a el director, subdirector, orientadores, docentes y personal administrativo que tienen cada uno la finalidad de que la educación se lleve a cabo como lo mandata el artículo 3° constitucional.

De hecho, aunque la figura de máxima autoridad recae en el director, es importante reconocer el papel que desempeña el subdirector académico ya que esta figura cobra relevancia al ser una pieza fundamental a la hora de cumplir con los estándares preestablecidos en dicho Artículo Constitucional.

Pareciera que la tarea del subdirector no va más allá de la observación de clases y de cerciorarse de que los docentes realicen una planificación adecuada acorde a los contenidos y procesos de aprendizaje que emanan del plan y programas de estudio. Sin embargo, existe mucho más que eso ya que la tarea es ardua en cada uno de los pasos que va señalando y dirigiendo dentro de la institución puesto que, si se hace una enumeración de las acciones a realizar, al final se puede hacer una comparación con un director de orquesta que lleva sobre sus hombros el buen desarrollo académico pedagógico en todos sus sentidos.

De hecho, este director de orquesta debe llevar de manera pertinente los tiempos, señalamientos y espacios para que se pueda transmitir a la audiencia lo que el compositor quiere mostrar, así mismo un subdirector académico debe estar pendiente de todo lo que le compete para poder dar los resultados que espera la población al momento de hacer sincronía con los aprendizajes y, sobre todo, que se pueda concretar el perfil de egreso.

El subdirector académico es multitareas. A continuación, se desarrolla parte de las funciones que realiza con la finalidad de obtener los mejores resultados en cuestión enseñanza-aprendizaje. Vamos por pasos.

Primeramente, debe tener una relación estrecha y directa con el director para la organización, planeación y toma de decisiones que favorezcan a la institución.

Segundo punto que va dirigido inherentemente a su función, es decir, que los docentes conozcan y se apropien de los planes y programas de estudios con la finalidad de garantizar que los estándares educativos se cumplan. Una de las partes necesarias que se deben considerar son los elementos que debe llevar su planificación y, como en muchas ocasiones no existen los espacios para que se reúnan todos los docentes y a su vez puedan ser partícipes de la construcción de un boceto, se consideran espacios como los consejos técnicos (CTE), esto con la intención de que todos los docentes a su cargo tengan presente los elementos base para el desarrollo de las metodologías a trabajar hoy en día con la propuesta de la Nueva Escuela Mexicana (NEM).

Hay que considerar en todo momento que, de acuerdo a la nueva propuesta, existe la autonomía profesional por lo que no se trata de homogenizar un formato de planeación, pero si tomar en cuenta los elementos que sin duda alguna deben tener. Una vez que el docente realiza su planeación, el subdirector académico deberá dar su visto bueno, se encarga de hacer la revisión de todas las disciplinas que enmarca la malla curricular sin olvidar tener siempre a su alcance el plan y programas de estudio. En consecuencia, una vez hecha la revisión se realiza, en caso de ser necesario, la retroalimentación o el acompañamiento de acuerdo a lo que el docente requiera, tomando en consideración que se garantice que la educación sea de excelencia.

Tercer punto, el subdirector debe conocer las características particulares de sus docentes a cargo ya que de esa manera será la forma en cómo podrá acercarse para hacer el acompañamiento o dar las sugerencias de apoyo para la mejora de la práctica docente como lo son capacitaciones y cursos. De igual manera podrá dar la evaluación del desempeño al docente observado, cuidando siempre esas relaciones interpersonales donde el docente no lo vea como una fiscalización hacia su trabajo o que, en su defecto, se sienta mal porque se le hacen observaciones para la mejora, es decir, aprender del error.

Es por ello que es preponderante que se tenga un conocimiento de las personas con las que trabaja ya que, a partir del ambiente que genere con los docentes de la institución, se podrá llevar con mayor responsabilidad el cumplimiento de las políticas educativas y la normatividad que se requiere para el buen desempeño de los docentes en este proceso de enseñanza aprendizaje.

Cuarto punto, brindar el apoyo directo en cuestiones de carácter disciplinario cuando este rebase al docente, es decir, hacer una intervención directa con padres de familia para que se lleguen a acuerdos que favorezcan en todo momento la formación académica de los educandos.

Quinto punto, se tiene la obligación de estar a la vanguardia del conocimiento de las metodologías propuestas en cada plan y programas de estudio, así como el uso de la tecnología para el desarrollo efectivo de los conocimientos.

Sexto punto, dar la seguridad a sus docentes es parte primordial de su función para lograr un profesorado comprometido con su labor que fomente la competencia sana entre ellos teniendo en cuenta el liderazgo, la empatía y el humanismo sin olvidar considerar siempre esos saberes con los que cuenta cada docente desde su experiencia a lo largo de los años en servicio que deberán complementarse con los conocimientos programados dentro de los planes de estudio.

Se puede observar que si no hay un buen dirigente dentro de las instituciones los resultados no serán favorables como cuando se hace una metáfora al hablar del director de orquesta pues si él no hace lo que le corresponde al dirigir y llevar los momentos y los tiempos adecuados, los resultados pueden ser catastróficos.

MARÍA DE LOS ÁNGELES MARTÍNEZ ÁLVAREZ es Doctorante en Planeación Evaluación y Gestión Educativa además de Maestra en Interculturalidad para la paz y los conflictos escolares por la Escuela Normal de Ecatepec. Actualmente es subdirectora académica a nivel secundaria, así como profesora en el mismo nivel educativo.